Director: Jill Irene Freidberg
Título Original: Grain of sand
Género: Documental
País: EEUU
Idioma: Español
Duración: 59 Minutos
Un granito de arena para entender el movimiento magisterial
En el marco del actual movimiento magisterial en contra de la “Alianza por la Calidad de la Educación” resulta importante ver y analizar el documental Granito de arena, de la cineasta estadunidense Jill Freidberg. El título en inglés es Mexican Educators Organized for Justice! y fue nominado para el Premio Pare Lorente 2005 de la Asociación Internacional de Documentales. Ha sido proyectado y comentado en varios países del mundo, pero en México ha tenido escasa difusión. Hoy, cuando en Morelos y otros estados del país está habiendo tantas y nutridas marchas de maestros, en contra de la Alianza, resulta útil reflexionar sobre el film.
Al respecto Pablo Gentilli expresó lo siguiente: “Una película sobre el vínculo más perverso entre una política corrupta y el abandono de un derecho humano fundamental como es la educación. Un documental imprescindible para comprender la crisis por la que atraviesa la escuela pública en América Latina. La narrativa de Jill Freidberg es contundente y avasalladora. Su obra es un grito de denuncia. Su mensaje, un grito de esperanza.”
El tema central del video es el avance del neoliberalismo en México y los efectos que ha tenido en el desmantelamiento de la educación pública. Retrata la resistencia magisterial contra las políticas neoliberales, dando cuenta de los logros del sindicalismo así como de los problemas internos, la corrupción y la crisis que, desde hace tiempo, enfrentan el sindicalismo y los movimientos de los maestros en el país. En sus escenas, aborda el conflicto de 2003 en Chiapas, en la Normal Rural de Mactumactzá, y recuerda que el problema fue causado, principalmente, por el empeño gubernamental de acatar las recomendaciones del Banco Mundial, con tal de recibir un préstamo de 40 millones de pesos, que ya en ese entonces demandaba convertir las normales en escuelas técnicas y semiprivadas. Con esto, la mente se transporta al presente y entiende que la Alianza, así como está planteada, constituye un empujón para que México cumpla cabalmente los dictados de la política internacional de corte neoliberal, con la que hace años se encuentra comprometido el gobierno.
En una entrevista que dio Freidberg reveló que el germen de su trabajo lo inició para un público estadunidense y canadiense con el objetivo de mostrar que los problemas que ha causado el neoliberalismo al sector educativo son globales, pero que no por ello tienen que aceptarse sino que, por el contrario, deben enfrentarse. Atrás de esta idea, dijo, está el cuestionamiento del papel que deben jugar los actores y sujetos de la educación frente a las tendencias privatizadoras. Expresó que esto compete sobre todo a los maestros de escuelas públicas debido a que sus principios, responsabilidad y quehacer están siendo profundamente afectados, principalmente los de aquellos docentes que trabajan en comunidades rurales y con jóvenes de escasos recursos, porque: “La estrategia de privatización involucra al sector privado con sus propios intereses, en los que por supuesto no figura ayudar a la sociedad”.
El video incluye entrevistas a figuras como Eduardo Galeano, quien afirma que lo que está pasando en México también sucede en los sistemas de educación pública en todo el mundo. Además, se da voz a algunos actores del movimiento, quienes coinciden en señalar que la resistencia magisterial está en crisis, principalmente porque los maestros han perdido el vínculo con sus comunidades. Se comprende que esto ha sido consecuencia de la precarización del trabajo ya que muchos maestros se atienen a defender sus intereses laborales y se nubla su compromiso con las causas educativas.
En el actual movimiento magisterial contra la Alianza, los maestros reivindican el derecho a heredar plazas y se oponen a la certificación anual que pretende establecer la Secretaría de Educación Pública. Siendo estas las reivindicaciones, muchos padres y madres de familia, que se han visto seriamente afectados por el paro, y la sociedad en general están descontentos con el movimiento pues no entienden cómo estas demandas se relacionan con la defensa de la educación pública, cuando lo que parece es que atentan contra su calidad. Desde este desentendimiento se enmascara la realidad y los medios de comunicación trasmiten imágenes de maestros flojos, irresponsables, revoltosos y corruptos en las escuelas públicas. Y así, ya no importa cuál sea el resultado del actual conflicto magisterial porque ya sirvió a los intereses de quienes lo generaron; la imagen social de la educación pública ya ha quedado dañada.
Esta claro que, cada vez más, el poder es ejercido por la vía de la información y de las imágenes. Hoy, la cuestión está en no restringir la información y las imágenes a las que construyen y proyectan los grupos hegemónicos. En lo que toca a comprender y tomar postura ante el actual conflicto magisterial, ver y reflexionar en el documental de Jill Freidberg resulta imprescindible. Por cierto, a Granito de arena le siguió Un poquito de tanta verdad. Este último documental, de la misma autora, trata del movimiento magisterial de Oaxaca, en 2006.
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